Es una realidad en el mundo de hoy que no son los más agraciados quienes reciben toda la atención cuando de arte se trata.
No es ninguna novedad que al ir a una librería tenemos miles de opciones delante nuestro. Lo que antes era tan simple como ir a comprar un libro, hoy se convierte en poder tomar un café con los amigos, conectarse a internet, comprar alguna película, el periódico o alguna revista de actualidad. Claro que ante las opciones literarias que tenemos delante nuestro, no es ninguna mala idea intentar subsanar el negocio por otro lado.
No es ninguna novedad que al ir a una librería tenemos miles de opciones delante nuestro. Lo que antes era tan simple como ir a comprar un libro, hoy se convierte en poder tomar un café con los amigos, conectarse a internet, comprar alguna película, el periódico o alguna revista de actualidad. Claro que ante las opciones literarias que tenemos delante nuestro, no es ninguna mala idea intentar subsanar el negocio por otro lado.